Irrupción de Gendarmería por orden de la Justicia en Casa de Gobierno, en relación a instrumentos públicos referidos a la modificación de la Constitución provincial.
El ministro jefe de Gabinete, Agustín Tita, atribuyó a “un sector de la Justicia aliado a un sector minúsculo de la política”, el allanamiento ejecutado por el juez Sergio Pepe, el jueves último en la sede de la Administración Central.
Agustín Tita, ministro jefe de Gabinete del Gobierno de Tierra del Fuego.
El funcionario se mostró sorprendido por el procedimiento dispuesto por el titular del Juzgado de Instrucción 1, Sergio Pepe, quien ordenó el allanamiento de la Casa de Gobierno el jueves último, a la vez que expresó su preocupación por la “judicialización de la política que en este caso impide a los vecinos de Tierra del Fuego ejercer uno de los valores fundamentales de la democracia como es el derecho al voto”.
De este modo Agustín Tita se refería a la disposición judicial de suspender el llamado a convencionales constituyentes que estaba previsto para el próximo mes de noviembre y la reciente medida de allanar la sede gubernamental con el fin de secuestrar elementos de informática para constatar el fechado de un decreto relacionado con la modificación de la Constitución fueguina.
Tita atribuyó la autoría de la medida “a una parte de la Justicia aliada a un sector de la política a los que no les gusta una ley que fue aprobada por los dos tercios de la Legislatura y que por eso recurren a todo lo que esté a su alcance para impedir lo que la enorme mayoría de los espacios políticos y sociales fueguinos están demandando. Ese sector de la Justicia está en anuencia con una parte minúscula de la política, que se niega a aceptar lo que se ha decidido en pleno ejercicio de los valores democráticos”.
“No les gusta la ley porque se ven amenazados en sus privilegios o desconozco cuál es la razón. Pero en democracia y en un orden republicano, el sistema funciona a través de un principio que debería ser sagrado: la decisión del soberano, que es quien elige a sus representantes” – agregó.
El ministro remarcó más adelante que “un sistema democrático se basa en el respeto irrestricto a la decisión popular. Todo aquello que atente contra el derecho de la ciudadanía a elegir y ser elegido en una elección libre, sin límites, proscripciones ni condicionamientos de ningún tipo es un atropello al estilo de gobierno y de vida en sociedad que hemos elegido. La democracia no es solamente votar cada dos años o cada vez que se llama a una elección. Es participación real y concreta del pueblo en las decisiones”.
Sobre la suspensión del acto electoral previsto para noviembre, el directo colaborador del gobernador Gustavo Melella, opinó: “Si se le impide a los vecinos votar, estamos en serios problemas. La política se dirime en los ámbitos políticos y no judiciales, como los asuntos de la Justicia no pueden ser decididos por la Legislatura ni el Ejecutivo. Judicializar la política es el peor de los caminos que podemos transitar”.
Con indignación, Tita se refirió al procedimiento judicial en sí, al que calificó de “inaudito” y dijo “no recuerdo que en toda la historia política de nuestra provincia la Justicia haya mandado a allanar la Casa de Gobierno para determinar la fecha de un documento público. Se movilizó a una fuerza federal, se dispuso de medios, hombres y tiempo para saber si el decreto en cuestión fue firmado el 25, el 26 o el 27 de julio. Esto es realmente insólito. Me pregunto qué opinión tendrán nuestros vecinos ante semejante despliegue por parte de la Justicia, que claramente debería estar para otras cosas”.
Sobre las dudas de la Justicia con lo actuado por el gobernador Gustavo Melella, el funcionario negó que se haya cometido ningún tipo de irregularidad: “Que se queden tranquilos, que tanto la ley como su promulgación, el llamado a elecciones y el decreto correspondiente fueron hechos en tiempo y forma, como la ley lo indica. Acá no hay nada que esconder. Por el contrario, todo esto surge ante una decisión política de convocar a pensar, debatir, acordar, consensuar una Constitución provincial que siente las bases para la Tierra del Fuego de los próximos 30, 40 o 50 años. No hay que temerle a la democracia, al contrario, hay que profundizarla a través del voto, de la representación legítima, del debate, de la búsqueda de consensos”.
Por último, el jefe de Gabinete expresó sus dudas con respecto a lo que interpreta como un accionar persecutorio por parte de la Justicia, anticipando que “después de lo vivido durante la jornada de este jueves, no nos sorprendería que acciones como estas vuelvan a suceder, seguramente no será ni la primera ni la última vez”, e instó: “Dejen que los fueguinos decidan. Su decisión es sagrada”.