Se trata de Juan Ignacio Macías, de 48 años de edad. El experimentado miembro de Defensa Civil de Ushuaia sufrió una caída fatal desde gran altura mientras realizaba una actividad recreativa en el Glaciar de Agostini.
Lo que comenzó como una jornada de caminata en las inmediaciones del Glaciar de Agostini terminó en tragedia cuando Juan Ignacio Macías, un experimentado miembro de Defensa Civil de Ushuaia, sufrió una caída fatal desde gran altura. El accidente ocurrió este domingo 29 de septiembre, mientras Macías, de 48 años, realizaba una actividad recreativa en la montaña.
Inmediatamente, se desplegó un operativo que incluyó un helicóptero para localizar el lugar exacto. Durante el vuelo de reconocimiento, se divisó un cuerpo inmóvil en el sector.
El Grupo de Búsqueda y Rescate, alertado por el incidente, se movilizó rápidamente hacia la zona con la esperanza de encontrar a la persona con vida. Sin embargo, al llegar al lugar, los rescatistas confirmaron lo peor: el hombre no presentaba signos vitales. Lo que hizo la situación aún más dolorosa fue el hecho de que la víctima era un colega cercano, con quien muchos de los rescatistas habían trabajado en otras misiones de auxilio.
La difícil tarea de recuperar el cuerpo sin vida de Macías fue asumida por sus propios compañeros, en lo que fue una jornada marcada por el luto para toda la Comisión de Auxilio. «Es un golpe muy duro para todos», comentó uno de los integrantes del equipo, visiblemente afectado.
El accidente ha conmocionado a la comunidad de Ushuaia, donde Macías era muy respetado tanto por su labor profesional como por su compromiso con el rescate de personas en situaciones de riesgo en las montañas fueguinas. Las autoridades locales han expresado sus condolencias a la familia y compañeros del fallecido, mientras se inician investigaciones para determinar las circunstancias exactas del trágico accidente.
El caso ha dejado una profunda sensación de pesar entre los equipos de rescate, quienes en esta ocasión no solo perdieron a un ciudadano, sino también a un compañero de trabajo.
En 1913, el padre salesiano Alberto María de Agostini, estableció una ruta de ascenso a través del glaciar que hoy lleva su nombre, siendo el primero en llegar a la cima del monte Olivia. |