En declaraciones a la prensa, el rector de la Universidad Nacional de Tierra del Fuego, Daniel Fernández, habló sobre la definición de la Cámara de Diputados de sostener el veto del presidente Javier Milei a la Ley de Financiamiento Universitario.
El representante de la casa de estudios expuso que esperaban “que no prosperara, pero más allá de que eso no sucedió, entendemos que seguimos teniendo 160 diputados y diputadas que votaron a favor del financiamiento de las universidades. Esta mayoría se vio en la marcha del 2 de octubre”.
“La población entiende la importancia de las universidades y que la discusión no va por el presupuesto. La Ley permitía sostener a las universidades en la actualización de los presupuestos frente a la inflación”, valoró.
Asimismo, explicó que “se pone un porcentaje del PBI que representa la Ley, pero el financiamiento está implícito. Es una actualización de gastos y de dinero del presupuesto, ajustada a la inflación. La Ley dice que si entran recursos que ya están destinados a la universidad, deben ejecutarse ahí, y no en otro lado”.
Además, mencionó que “hay cuestiones de las funciones primordiales de la universidad, que tienen que ver con la investigación, extensión y vinculación con el territorio, y no tenemos financiamiento para continuarlas. Se hace a pulmón con lo que los estudiantes y docentes pueden hacer”.
Fernández indicó que “los salarios de docentes y no docentes fue algo por lo que se marchó; cortaron algún financiamiento destinado a las becas; las construcciones están paralizadas totalmente. Los ítems del presupuesto universitario están congelados, o no se actualizan con la inflación. Hay un presupuesto reconducido, que no tiene en cuenta las proyecciones que tuvimos para este año”.
“El veto prosperó, tenemos que seguir luchando para que el Presupuesto 2025 refleje las necesidades de las universidades”.
Asimismo, indicó que tratan “de llegar a fin de año con las cuentas cerradas. Tenemos dificultades y seguimos recortando en cuestiones que no están financiadas. Seguimos dialogando con la Secretaría, que nos dice ‘esa partida va a llegar’, pero no llega. Será un cierre incierto, pero debemos cerrar el año”.
Respecto al impacto de la crisis económica frente al desfinanciamiento, el rector de la UNTDF precisó: “Hubo incrementos diferenciales entre Ushuaia y Río Grande, pero fueron de más del 500%. Son valores que hacen difícil el sostenimiento del pago de los gastos diarios. Eso pasa con todo. Incluso con los traslados en las ciudades. Todo aumenta, pero el presupuesto no”.
En cuanto a la discusión por las auditorías, Fernández explicó: “Más de 90% del presupuesto de las universidades tiene que ver con salarios. Eso se rinde mensualmente y la Secretaría de Políticas Universitarias tiene esos datos, a través de los sistemas que manejan las universidades para la administración. El otro 10% tiene que ver con gastos de funcionamiento”.
“Las universidades tenemos sistemas, que se llaman SIU. Son sistemas informáticos que permiten gestionar los aspectos de la gestión de la universidad. El acceso es para cualquiera”, siguió.
Y denunció que desde el Gobierno nacional (y el oficialismo) “quieren mostrar datos que hagan dudar a la población respecto a la universidad. Como cuando la comparan con Chile, cuando el acceso es muy diferente. Claramente los porcentajes de egresos serán distintos, porque uno incluye a un gran número y en otro entran los que más tienen. Son formas de moldear la realidad”.
Finalmente, fue consultado por las medidas de fuerza adoptadas por la comunidad de la UNTDF, en consonancia con otras universidades del país: “Hay dos modalidades. En Río Grande hay como una toma. Se reúnen las personas de la sede, para decidir cómo visibilizarlo. En Ushuaia hay una ocupación activa, tratando de decidir qué se hace en el día”.
“Quizás haya clases públicas, alguna pequeña movilización y demás. Son cosas que se discuten ahora, de manera participativa”, cerró.