Octavio Lapetina, estudiante riograndense de Periodismo, entrevistó al intendente en la inauguración de la Casa de Jóvenes Fueguinos y Santacruceños en Córdoba. Con una clara vocación por la comunicación, el estudiante de segundo año de la CUP, abordó al mandatario municipal para conocer detalles del proyecto que beneficiará a los chicos de Tierra del Fuego y de Santa Cruz que estudien en Córdoba.
La reciente inauguración de la Casa de Jóvenes Fueguinos y Santacruceños en Córdoba fue el escenario ideal para una entrevista realizada por Octavio Francisco Lapetina, un joven de Río Grande.
Octavio, quien cursa el segundo año de la carrera de Periodismo en el Colegio Universitario de Periodismo (CUP) de Córdoba, aprovechó la ocasión para dialogar con el intendente de Martín Pérez sobre los pormenores de este nuevo espacio para los estudiantes de Tierra del Fuego.
Octavio Lapetina: ¿Qué impacto esperan que tenga este proyecto en la vida de los jóvenes fueguinos y en la cotidianeidad estudiantil?
Martín Pérez: Un impacto muy positivo en su vida cotidiana, en su proyecto de vida. Va a ser un lugar donde puedan abrazarse con amigos, encontrarse con gente conocida, tener talleres, espacios de acompañamiento y, si lo necesitan, apoyo psicológico. El desarraigo es muy duro, y por eso, desde nuestra experiencia, quisimos crear un lugar de contención y apoyo, donde los chicos puedan sentirse acompañados en su paso por la universidad.
O.L.: ¿Cómo se gestionará la casa diariamente? ¿Habrá personal específico a cargo?
M.P.: Sí, va a haber personal a cargo de las cuestiones administrativas, de mantenimiento, de los talleres, y los espacios culturales y de salud. Estamos formando un equipo junto con la gente de Río Gallegos para brindar todo el apoyo necesario a los estudiantes. Además, iremos incorporando nuevos servicios conforme surjan necesidades.
O.L.: ¿Qué talleres o programas específicos tienen planeados?
M.P.: Habrá apoyo en materias como matemática, física, química, para aquellos que necesitan asistencia durante los cursos de ingreso. También tendremos talleres y charlas específicas, dependiendo de las carreras y los grupos de estudiantes. Además, es fundamental brindar apoyo psicológico para que los chicos puedan adaptarse mejor a su nuevo entorno.
O.L.: Dado el contexto económico actual ¿cómo garantizarán la sostenibilidad de la casa?.
M.P.: Estamos haciendo un esfuerzo económico importante, con aportes tanto de los municipios de Río Grande y Río Gallegos como de empresas del sector privado que nos están acompañando. La colaboración entre los municipios permite compartir los costos y asegurar que la casa funcione sin problemas. También estamos buscando nuevas formas de apoyo privado para asegurar su sostenibilidad a largo plazo.
O.L.: ¿Qué mensaje le gustaría transmitir a los estudiantes que se beneficiarán de esta iniciativa?
M.P.: Que vengan, que conozcan la casa, que participen, que se sumen. Queremos que se sientan cómodos, que disfruten de los espacios que hemos creado, como los lugares para tomar sol, la parrilla, las computadoras, el comedor, las áreas para estudiar. La casa está pensada para que sea un lugar agradable, con todo lo necesario para que los chicos puedan concentrarse en sus estudios, pero también para que disfruten de su tiempo aquí y sean felices.»
Octavio, con tan solo dos años de formación en Periodismo, demostró una gran capacidad para abordar temas de relevancia social, como lo hizo en esta entrevista. Su interés por conocer las iniciativas que afectan directamente a la comunidad estudiantil fueguina en Córdoba lo puso de manifiesto. En su primer contacto con un funcionario de alto nivel, el joven riograndense se mostró tranquilo y espontáneo, y evidenció curiosidad, profesionalidad y su enfoque como testigo de los proyectos que marcan el futuro de la generación a la que pertenece.