Con el objetivo de aliviar la crisis habitacional en Ushuaia. El Concejo Deliberante de Ushuaia analizará en sesión extraordinaria, el día miércoles 18 de diciembre, la aplicación de un impuesto diferencial a propiedades ociosas. El proyecto de autoría de la edila Laura Avila apunta a combatir la falta de oferta de alquileres permanentes en la ciudad.
El Concejo Deliberante de Ushuaia sesionará este miércoles 18 de diciembre, en una reunión extraordinaria convocada para tratar, entre otros temas, la aplicación de una carga de 150 veces el Impuesto Inmobiliario a aquellas viviendas que se encuentren desocupadas dentro del ejido urbano. La medida busca abordar la situación habitacional que atraviesa la ciudad y fomentar el alquiler permanente.
La sesión, que comenzará a las 16:30 horas en la sala de comisiones ubicada en Gobernador Paz y Piedrabuena, fue solicitada por los concejales del oficialismo Laura Ávila, Yésica Garay, Nicolás Pelloli y Gabriel De la Vega, quien preside la Comisión Legislativa de Receso. Entre los temas del orden del día se destacan la regulación de unidades gastronómicas móviles, la modificación de la ordenanza del Instituto Municipal de Deportes, y la incorporación del artículo “Viviendas ociosas y desocupadas” a la Ordenanza Fiscal.
Con respecto a este último tema, la iniciativa presentada por la concejala Laura Ávila tiene como objetivo otorgar herramientas al Ejecutivo Municipal para enfrentar la falta de oferta habitacional en Ushuaia. Según argumentó en el borrador de su proyecto “la ciudad enfrenta una crítica escasez de alquileres destinados a vivienda permanente, mientras que la oferta de alquileres temporarios o turísticos ha crecido significativamente debido al flujo constante de visitantes a lo largo del año”.
“Es de público conocimiento la situación actual habitacional de nuestra ciudad y recibimos diariamente numerosos reclamos de vecinos por la casi nula oferta de alquileres para vivienda permanente”, señaló Ávila, quien enfatizó la necesidad de incentivar la disponibilidad de propiedades para residentes locales. En esa línea, la propuesta contempla que las viviendas ociosas, es decir, aquellas desocupadas, abonen un impuesto diferencial, siguiendo un esquema similar al que se aplica actualmente sobre terrenos baldíos.
De aprobarse el proyecto, los propietarios de viviendas desocupadas deberán pagar una tasa equivalente a 150 veces el valor del Impuesto Inmobiliario, con el fin de desalentar la acumulación de propiedades vacías y aumentar la oferta de viviendas disponibles para alquiler permanente. Tomando como referencia un valor promedio, en base a una vivienda familiar tipo, sobre la que se abonen $15.000 de modo bimestral, dicha carga se transformaría en $2.250.000 al ser multiplicada por 150.
En el proyecto se hace constar que se presumirá que una propiedad será considerada desocupada, vacía u ociosa “si no se habita por seis meses y esa condición solo podrá desestimarse con pruebas de residencia efectiva, alquileres formales o inscripción en registros turísticos habilitados”.