CONCURRENTES AL LOCAL BAILABLE DENUNCIARON PÚBLICAMENTE QUE EL PISO SUPERIOR “ESTUVO A PUNTO DE DESPLOMARSE CON MUCHISIMA GENTE”
Momentos de desesperación vivió una gran cantidad de personas que se encontraban en la planta alta del local nocturno “El Náutico”, la madrugada del sábado último, cuando al parecer por el exceso del peso que puede soportar la estructura, la superficie se cimbreó y todos creyeron que se desmoronaría debajo de sus pies.
Algunos de los presentes en ese lugar se acercaron ayer a Diario Prensa para señalar que “creímos que el suelo colapsaba y nos caíamos todos a la pista de baile, en el piso inferior. Éramos muchísimas personas las que estábamos arriba y que sentimos como si de repente cediera el piso varios centímetros. Fue un temblor fuerte que después se detuvo. La verdad es que todos sentimos pánico”.
Otra de las personas que se acercaron a contar su experiencia y que pidió no identificarse “porque después no nos van a permitir volver a entrar o vamos a tener problemas con los vigiladores”, relató que “la verdad es que todo fue un caos porque creímos que iba a ceder el piso. El lugar estaba lleno, muy lleno de gente. Cuando pasó eso muchos se apuraron a intentar bajar por la escalera pero se agolparon en un mismo lugar y se empujaban. Yo preferí quedarme pegado a la pared para que no me llevaran por delante. Tenía miedo además de caerme y que me pasaran por encima. Afortunadamente todos pudimos bajar sanos y salvos”.
La tercer voz relató su experiencia: “Cuando pasó esto cortaron la música y prendieron las luces en todo el local y el personal de seguridad dio orden de que todos los que estábamos arriba, bajáramos. Después cerraron el acceso a la planta alta, volvieron a poner música y a apagar las luces y siguieron bailando, aunque muchos decidimos irnos porque las cosas pudieron terminar muy mal. Esperemos que la Municipalidad intervenga e inspeccione antes de que realmente haya que lamentar una desgracia. Es evidente que ese piso no está pensado para soportar el peso de mucha gente”.
Por último, una de las chicas que estuvo en el lugar de los hechos, agregó: “Mi mamá me contó que en ese edificio de Maipú y Belgrano funcionó hace muchos años una tienda que se llamó Casa Magallanes. Ahora en la planta baja funciona una pizzería y en la planta alta, el boliche bailable El Náutico, que antes estaba en Maipú, del otro lado de la calle y que es del ex legislador Alejandro Vernet y de su esposa Liliana Martínez Allende. Se ve que hicieron modificaciones en la estructura original y pusieron una especie de corredor en la planta alta, tipo balcón, que rodea a la pista de baile que está abajo. Ojalá este sea un llamado de atención para que el día de mañana no haya que lamentar algo más que el tremendo susto que pasamos…”.
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