El siniestro provocado en pleno horario escolar con papel rociado con combustible en la Escuela Nro. 9 Comandante Luis Piedrabuena, en Ushuaia, se registró el martes 21 de mayo.
El Juzgado de Instrucción Nro. 2, a cargo de la jueza María Cristina Barrionuevo, ordenó el allanamiento del domicilio sito en calle Yowen al 1.800 en donde se secuestraron elementos de interés y se notificó a su moradora, Griselda Irene Acosta, de 37 años de edad, de derechos y garantías procesales.
Contrariamente a lo que inicialmente había informado la Policía, la investigación iniciada en torno al siniestro intencional registrado en instalaciones de la Escuela Provincial Nro. 9 “Comandante Luis Piedrabuena”, sita en calle Río Grande 66, en Ushuaia, tiene a una mujer como sospechosa de la autoría, y no a un hombre como había trascendido en las primeras horas.
Como fuera informado, el martes 21 de mayo a las 10.50, alumnos de la escuela de nivel primario, debieron ser evacuados de las aulas y conducidos al playón interno de un establecimiento educativo lindante, mientras los docentes daban aviso a los padres para que fueran a retirarlos. En el establecimiento se encontraba presente la vicedirectora, Analía Torres y el director provincial de Infraestructura Educativa, Franco Tangari, quienes organizaron el operativo de evacuación de los menores.
Simultáneamente personal bomberil y policial de la comisaría segunda trabajaban en la extinción de un principio de incendio detectado en el sector del entretecho del baño de alumnos con discapacidad, ubicado entre la sala de maestros y la dirección.
Una vez sofocado el fuego y disipado el humo se hizo presente una comitiva de la División Policía Científica, cuyos peritos lograron determinar que la ignición tuvo su punto de inicio en papeles rociados con un elemento acelerante, como nafta u otro tipo de combustible.
Dados los indicios de criminalidad existentes, fue convocado personal de la División Delitos Complejos de la Policía, quienes de inmediato comenzaron a recabar testimonios y a relevar en la zona las cámaras de videovigilancia.
Finalmente, 3 días después del igneo, el Juzgado de Instrucción Nro. 2 a cargo de la jueza María Cristina Barrionuevo, libró una orden de allanamiento para el domicilio sito en calle Yowen al 1.800, arrojando el mismo resultado positivo. Aunque no se conoció en detalle qué tipo de elementos se hallaron durante la medida judicial, sí se pudo confirmar que revisten interés para la causa. Dado el hallazgo de objetos incriminantes fue notificada de derechos y garantías procesales su moradora, a quien se la identificó como Griselda Irene Acosta, de 37 años de edad.
El hecho causó gran conmoción debido a la derivación impensada que pudo tener el atentado, dado que al momento de ser provocado el fuego en el establecimiento, en las aulas los niños y sus docentes estaban en clases.
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