Se trata de un exclusivo crucero con 128 parejas swinger. Argentina se convertirá en el epicentro de una experiencia única que combina lujo, erotismo y paisajes extremos. “El frío no será un problema porque las noches estarán llenas de experiencias picantes”, prometieron los organizadores del viaje que comenzará en Ushuaia y culminará en el continente blanco.
Aunque ya existió en las pantallas de la televisión la serie “el crucero del amor”, ahora “el crucero del deseo” se hará realidad y tendrá como punto de embarque el puerto de Ushuaia, con destino a la Antártida.
Del 14 al 25 de enero, 128 parejas abordarán un exclusivo crucero swinger organizado por la agencia Luxury Lifestyle Vacations, cuyas plazas se agotaron en tiempo récord, bajo la promesa de gozar de experiencias “calientes e inolvidables”.
Sobre el viaje que costará unos 12 mil dólares por pasajero, con todo incluído en el sentido más literal de la expresión, sus organizadores, José y Claudia Aguirre, refirieron que desde hace más de 20 años que se dedican a crear propuestas destinadas a parejas liberales, en ambientes exclusivos, discretos y en los más recónditos lugares del mundo.
“Este no es solo un crucero, es una celebración de la sensualidad y la conexión entre parejas que comparten una filosofía de vida similar”, explica José, mejor conocido como “Pepe” entre sus clientes.
En esta ocasión y por primera vez, el escenario hot no se desplegará en paradisíacas playas caribeñas sino en la imponente Antártida, con su entorno único de hielo y océano. Aunque el frío será protagonista durante el día, las noches estarán diseñadas para encender los sentidos: «Diseñamos un sinfín de actividades picantes y muy calientes a bordo», adelantaron desde la agencia, dejando entrever que habrá bailes temáticos de disfraces y juegos sensuales entre las parejas “para romper el hielo”.
Las jornadas comenzarán con excursiones para explorar glaciares y paisajes únicos, pero es al caer el sol cuando el verdadero espíritu del crucero cobrará vida con actividades pensadas para dar rienda suelta a la sensualidad bajo las estrellas.
En la piscina y jacuzzi los viajeros podrán grupalmente relajarse y socializar en ambientes íntimos creados con efectos lumínicos, musicales y con la degustación de bebidas espirituosas.
Pero no solo habrá pasiones desenfrenadas a bordo, también se dictarán seminarios sobre sexualidad y tantra que estarán a cargo de expertos “para facilitar la conexión con nuevas formas de placer”, explicaron a la prensa Claudia y “Pepe”.
José Aguirre admite que este será un crucero distinto a los que suelen realizar en destinos de clima cálido, pero asegura que el frío no será un obstáculo para disfrutar: “Vamos preparados con vestimenta adecuada, pero el toque sexy estará siempre presente. Este viaje combina la aventura de explorar un lugar tan remoto como la Antártida con el desafío de neutralizar las bajas temperaturas con el calor de la pasión”.
Estar en el barco no solo requerirá una mentalidad particular sino también mucho dinero en las cuentas bancarias, dado que el pasaje más modesto implicará un desembolso de 12.499 dólares por persona, para ocupar un camarote simple hasta los U$S 21.499, correspondientes a una habitación con jardín de invierno. Además se deberán adicionar 450 billetes estadounidenses extra, en concepto de tasas y otros cargos.
Las parejas arribarán desde todo el mundo a Buenos Aires – en su mayoría son estadounidenses – para luego volar al aeropuerto Islas Malvinas, en Ushuaia. Desde allí serán trasladadas al puerto, en donde abordarán el megayate Seabourn Pursuit. Cabe destacarse que entre el pasaje solo hay un crucerista de nacionalidad argentina.
“Este será un viaje para dejarse seducir, una aventura erótica en un entorno inigualable como es la Antártida”, concluyeron diciendo desde la agencia Luxury Lifestyle Vacations. “No será solo un crucero, será un recuerdo imborrable para las parejas que se atrevan a vivirlo” – concluyeron.