Luego de sobrevivir a una votación interna, el Primer Ministro británico apareció en un evento con la princesa Ana para conmemorar el 40 aniversario del conflicto en el Atlántico Sur
Boris Johnson, el premier británico, sugirió que podría visitar las Malvinas por primera vez ahora que “las cosas son un poco más tranquilas en Westminster”, en una aparente broma luego de mantenerse en el cargo tras una votación de las filas conservadoras.
En un evento para conmemorar el 40 aniversario del conflicto de las Islas Malvinas, el primer ministro dijo que estaba “avergonzado” de decir que pensaba que era el único de los oradores que incluía a la princesa Ana, que nunca había estado en el territorio. Pero dijo: “Ahora las cosas están un poco más tranquilas en Westminster, tal vez pueda ir antes de que pase mucho tiempo. Las cosas parecen relativamente pacíficas”.
Johnson se dirigía a una recepción en la Cámara del Portavoz en el Palacio de Westminster el martes después de una votación de confianza magullada el lunes por la noche. Anteriormente, para conmemorar la ocasión, los Marines Reales realizaron la ceremonia del Retiro de Palizas en la Corte del Portavoz vigilada por la Princesa Real y Sir Lindsay Hoyle, el Portavoz de los Comunes.
El premier afirmó que las Fuerzas Armadas de Gran Bretaña lograron lo que “muchos pensaban que era imposible” en las Malvinas.
Dijo: “Recuerdo, todavía estaba en la escuela, recuerdo el horror de enterarme del destino del HMS Sheffield, del Transportador Atlántico, y la verdadera idea de que las cosas podrían ir en sentido contrario, y que nuestro país realmente podría enfrentar un desastre en el Atlántico Sur”.
El premier añadió: “Estábamos luchando por el principio esencial de que los habitantes de las Islas Malvinas, al igual que las personas de todo el mundo, tienen el derecho soberano de decidir su propio destino y elegir su propia lealtad. Mientras miramos el mundo de hoy, podemos ver demasiado obviamente cómo ese principio todavía está en peligro y todavía necesita ser defendido. Siempre hay algún dictador que prueba si este país y nuestros amigos están realmente dispuestos a defender ese principio, que es la base esencial de un mundo pacífico. Hace 40 años, en las Malvinas, nuestras Fuerzas Armadas demostraron que defenderíamos lo que era correcto”.
La princesa Ana dijo que, por su experiencia, una visita a las islas siempre “vale la pena el esfuerzo”.
“Ese sentimiento constante de gratitud por parte de los isleños y comprensión de lo que se logró todavía se siente mucho. Siempre es un placer ir allí”, dijo. La princesa Ana también rindió homenaje a los veteranos del conflicto, diciendo: “Su coraje y habilidad en la batalla fueron probados a fondo y se consideran ejemplares y esta nación os debe a todos una enorme deuda de gratitud”.
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