Se trata de Sergio Amado, de 62 años de edad, quien quedó inmediatamente detenido luego de la lectura de la sentencia del Tribunal femenino que coincidió con el criterio de la Fiscalía.
El sujeto había arribado a la instancia de juicio en libertad por hechos que se remontan al año 2018 y 2019, cuando fue denunciado por abuso sexual de su hijastra de 9 años de edad. Sus abogadas defensoras pidieron que curse la pena en su domicilio.
El Tribunal de Juicio en lo Criminal del Distrito Judicial Norte condenó el martes 20 de agosto a Sergio Amado – cuya identidad se proporciona debido que no comparte apellido con su víctima – a cumplir la pena de 12 años de prisión, por haber sido hallado penalmente responsable del delito de abuso sexual.
El sujeto, de ocupación enfermero, estaba acusado de haber sometido a tocamientos impúdicos, roces y otras prácticas de índole sexual, a su hijastra de 9 años de edad, hija de quien era su pareja en los años 2018 y 2019.
El hombre de 62 años de edad afrontaba cargos por “abuso sexual gravemente ultrajante, agravado, en un número indeterminado de veces”, en perjuicio de la menor de la que abusaba cada vez que su madre se ausentaba de la casa en la que convivían.
Amado pasó los cinco años transcurridos desde los hechos juzgados, en absoluta libertad, situación que se modificó luego de leída la sentencia por el tribunal femenino compuesto por las juezas Verónica Marchisio, Cecilia Cataldo y Natalia Buitrago, quienes ordenaron su inmediata detención.
La condena impuesta por el tribunal fue coincidente con la requerida por el fiscal mayor Martín Bramati en los alegatos, etapa en la que las abogadas particulares que tuvieron a cargo la defensa de Amado habían solicitado a las magistradas que absuelvan a su representado o caso contrario, le aplicaran la pena mínima para el tipo de delito juzgado.
Las juezas dispusieron también que la Subsecretaría de Políticas de Género de la Provincia y el Área de Salud Mental del Municipio de Río Grande implementen un dispositivo de orientación, contención y asistencia para la niña vulnerada, actualmente de 15 años de edad y que el Ministerio de Desarrollo Humano de la provincia evalúe la situación actual de la víctima como así también de su grupo familiar, y que implemente los programas sociales pertinentes.
Luego de conocido el veredicto las abogadas patrocinantes de Amado, Sandra Arenas y Paula Barrionuevo, pidieron clemencia para su defendido y solicitaron a las magistradas que lo autoricen a cumplir la condena en su domicilio, aduciendo que tiene 62 años y que tendría algunos problemas de salud.
Los fundamentos de la sentencia serán leídos el próximo 3 de septiembre a las 13.