La ministra de Salud de la Provincia, Judit Di Giglio, habló sobre la situación que atraviesa el sistema sanitario ante el constante incremento de personas sin obra social y el impacto que tiene esto en el sistema público. “No solo creció la demanda, sino que disminuyeron los ingresos”, advirtió.
La titular de la cartera sanitaria, Judit Di Giglio, explicó que “es un número muy alto. Es cobertura exclusiva del Estado, que financia la atención en nuestra provincia, sino el tratamiento y, en caso de que haga falta una derivación, también”.
Asimismo, advirtió que “no solo creció la demanda, sino que disminuyeron los ingresos. El sistema de salud de nuestro país está diseñado y pensado con 3 efectores: el público, el privado y las obras sociales. No existen lugares en los que no esté diseñado de esta manera. Ninguna ciudad tiene la cantidad de camas sólo en el público, o en el privado”.
“En el hospital aumentó el número de consultas de personas que no tienen obra social. Antes lo hacían, pero contaban con una prepaga o una obra social sindical. Siguen consultando, pero el hospital no recupera costos. Por otro lado, personas que antes elegían el efector privado y ya no cuentan con obra social, se vuelcan al efector público”, agregó.
“En los mismos meses del año pasado, teníamos un número de 47 mil, o un tope de 50 mil. En el segundo semestre del año pasado, empezó a incrementar”.
Por otro lado, la ministra destacó la importancia de las nuevas obras anunciadas para el HRRG: “El Hospital Regional Río Grande necesita aumentar su capacidad instalada y un trabajo continuo de mantenimiento y reestructuración, para tener la atención que cada paciente merece”.
“Con esta obra se amplía en un número importante de camas; el sector de maternidad nuevo, con habitaciones individuales; servicios de parto respetado y parto en el agua. Además de habitaciones en clínica médica y cirugía, y nuevas en sectores que no estaban destinados a esto”, enfatizó.
Además, adelantó que “las habitaciones de clínica y cirugía se irán cerrando de a dos. Es un trabajo muy artesanal el que se realiza, porque el hospital debe seguir funcionando. Es un gran desafío, pero estamos muy felices de hacerlo. Son obras para todos los habitantes de la ciudad y de la provincia, que se planifican pensando en los próximos 20 o 30 años”.
Por último, se refirió a la recaudación por la atención a extranjeros y aclaró que “Nuestros hospitales son de autogestión, hace muchos años. Ellos manejan su fondo de recupero. En los últimos años se realizó un trabajo enorme en las áreas administrativas y se está recuperando muchísimo. Por supuesto que a los extranjeros se les cobra un seguro”.
“No tenemos el problema de otras provincias, que tienen fronteras lindantes. Puede suceder en Río Grande. A veces sucede que vienen familiares a visitar el área de Porvenir y Punta Arenas, y les sucede algo de salud. Son casos eventuales”, culminó.