SE TRATA DE MARIA JOSE MOLINA, APODADA “MAJO”, DE 38 AÑOS DE EDAD.
Un extraño caso ganó desde ayer las redes sociales, en las que comenzaron a circular fotos de una vecina de la capital fueguina, María José “Majo” Molina, con la que sus familiares y amigos no se pueden comunicar desde hace – a hoy – ocho días.
Lo único cierto y confirmado hasta este momento es que la mujer, de 38 años de edad y madre de tres niños, abordó un vuelo de la aerolínea LAM, el pasado 16 de julio, en el aeropuerto Islas Malvinas, en Ushuaia y arribó a Aeroparque, en Buenos Aires. El dato es importante porque algunas versiones ponían en duda que “Majo” hubiera efectivamente ascendido al avión, las que fueron descartadas con la nómina de pasajeros en la que aparece su nombre.
Fue su pareja, Daniel Alberto Veizaga, de 44 años de edad, quien dio la voz de alarma al dirigirse a dependencias policiales para manifestar su preocupación ante la falta de contacto telefónico con su mujer y los comentarios de familiares residentes en Buenos Aires que negaron haberla visto.
Ante el paso de los días, Veizaga efectuó una solicitud de paradero formal. El hombre sostiene que el lunes 16 de julio llevó a María José al aeropuerto para tomar el vuelo que la llevó a Buenos Aires, desde donde después pensaba ir hasta la terminal de ómnibus de Liniers para continuar viaje a Mendoza, Tunuyán. Ella quería visitar la tumba de su padre. Tenía previsto retornar a Buenos Aires el día 21 de julio y el 30 a Ushuaia, pero el jueves 19 – según palabras de su pareja y padre de sus hijos – fue la última vez que su mujer se comunicó con él, aunque su última conexión por WhatsApp fue el 21 a las 13.
María José es oriunda de la ciudad de Río Grande, en donde se domicilia su hermana Belén, quien al igual que las amistades que tiene en la localidad, ignoraba que hubiera viajado al norte del país.
La enigmática desaparición de quien es integrante de la Asociación de Boy Scouts “Nuestra Señora de las Nieves” – en donde ella eligió llamarse “Nutria Jovial”, de acuerdo a la costumbre – cobró el interés de algunas organizaciones sociales del norte del país, quienes se sumaron a la búsqueda difundiendo la foto de María José Molina y el número telefónico de su esposo – 02901 15498783 – para comunicar cualquier dato que permita dar con su paradero.
Se espera con expectativa, más allá de todas las medidas tendientes a encontrarla, que el próximo lunes 30 de julio “Majo” descienda del avión en el que ya tiene confirmado su fecha de regreso, sana y salva, en el caso que hasta ese momento no se haya logrado dar con ella.
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