Marcos Saldivia abusó de su hijastra entre los años 2016 al 2019, desde los 14 a los 17 años de edad de la menor.
Esto ocurrió porque la víctima recordó un hecho que no había mencionado en el primer juicio que concluyó con una pena de 8 años para el sujeto de 47 años de edad. Culminado el segundo debate, el total a purgar en la cárcel por el dos veces condenado es de 10 años.
El Tribunal de Juicio en lo Criminal de Río Grande, compuesto por los jueces Pedro Fernández, Cecilia Cataldo y Fernando González, condenó el jueves 17 de octubre a Marcos Saldivia, residente en Río Grande, a 10 años de prisión efectiva.
El hombre ya estaba cumpliendo una condena de 8 años de prisión por abuso sexual, de la cual llevaba 4 años cumplidos. En esta ocasión, fue juzgado por un nuevo hecho de abuso sexual contra la misma víctima, ocurrido en 2019. Debido a la nueva condena y la anterior, el Tribunal decidió unificar ambas penas en 10 años de prisión.
La pena coincidió con la solicitada por la fiscal especializada en violencia de género e intrafamiliar, la abogada Mónica Macri, durante los alegatos y contó con la oposición argumental del defensor oficial Marcelo Escola.
De esta manera Saldivia fue condenado por tres hechos de abuso sexual en perjuicio de la hija de quien era su pareja conviviente. El primero de ellos, registrado pocos días antes de que la menor cumpliera sus 15 años de edad, consistió en un abuso sexual simple, en tanto otro posterior en 2019, fue agravado. Al tercer episodio abusivo denunciado con posterioridad y que se remonta al año 2018, los jueces decidieron el jueves último sumar 2 años más de cárcel por tratarse de un abuso sexual agravado por acceso carnal, unificándose la pena en un total de 10 años de reclusión.
Es importante destacar que la serie de abusos salió a la luz cuando la adolescente decidió contarle a su madre lo que estaba ocurriendo con su padrastro.
Los fundamentos de la sentencia serán leídos el próximo 31 de octubre.