La menor realizaba desde su teléfono celular llamados a la Policía advirtiendo la existencia de artefactos explosivos en colegios secundarios de Río Grande, logrando que los mismos fueran evacuados y las clases suspendidas
Personal policial de la División Delitos Complejos allanó su vivienda, secuestró el dispositivo telefónico y advirtió a su madre que está incursa en una causa judicial por la comisión de un delito.
La eficaz labor del equipo investigativo de la División Delitos Complejos y la comisaría quinta de la ciudad de Río Grande, permitió esclarecer dos incidentes registrados en colegios secundarios de la ciudad, los días 14 y 19 de agosto del corriente año. En esas oportunidades, la Policía recibió llamadas telefónicas de alguien desconocido que les advertía que en el interior de los edificios educativos se habían instalado artefactos explosivos próximos a estallar. Esto motivó en los dos casos analizados la evacuación de las instalaciones y la suspensión de las clases, mientras personal policial y bomberil recorría minuciosamente cada rincón de los edificios.
Con suficientes elementos indiciarios, el Juzgado de Instrucción N° 2 del Distrito Judicial Norte, a cargo del juez Raúl Nadim Sahade, ordenó la realización de un allanamiento, ejecutado el martes 27 de agosto en horas de la tarde, en un domicilio ubicado en la calle Moyano al 900. Dicho operativo arrojó resultados positivos, procediéndose al secuestro del teléfono celular utilizado para realizar las llamadas, el cual pertenece a una menor de 15 años.
En la misma ocasión los efectivos policiales procedieron a notificar a la madre y a una hermana adulta de la adolescente, acerca de la situación procesal en la que se encuentra la jovencita.