El conductor que embistió a dos inspectores municipales en Ushuaia ya había protagonizado otros incidentes.
El joven denunciado penalmente por atropellar a dos agentes municipales en Ushuaia ya contaba con antecedentes por hechos similares ocurridos en 2016 y 2017, entre otros que lo habían llevado a estar inhabilitado para conducir hasta 2026.
Néstor Fabián Véliz, de 31 años de edad, se convirtió el viernes último en el exponente de un perfil de joven que abunda en las calles de Ushuaia y que se caracteriza por poner en riesgo su propia vida y la de terceros conduciendo a elevada velocidad, y contraviniendo las reglas de tránsito.
El conductor Néstor Fabián Véliz, de 31 años, denunciado penalmente tras embestir a dos inspectores de tránsito para evadir un control en Ushuaia, acumula un historial de infracciones y siniestros viales. Su inhabilitación para conducir hasta agosto de 2026 está vinculada a episodios previos de gravedad, que dan cuenta de una mala conducta reincidente al volante.
Cabe mencionarse que a sus 23 años, en octubre de 2016 – y cuatro años después de arribar a Ushuaia, procedente de la localidad bonaerense de Bahía Blanca – Véliz protagonizó un siniestro vial a bordo de una motocicleta roja al chocar contra un automóvil. No llevaba casco y debido a ello sufrió lesiones faciales de consideración. Meses más tarde, en febrero de 2017, volvió a verse involucrado en otro incidente: manejando un Peugeot 208 chocó contra una combi estacionada y sin ocupantes, en inmediaciones de la calle Prefectura Naval. En aquella oportunidad también intentó eludir su responsabilidad y fugarse, y tampoco contaba con la documentación del vehículo.
El reciente episodio del viernes por la noche se suma a este historial. Véliz tras intentar evadir un operativo municipal, embistió a dos inspectores y fue denunciado penalmente por la Municipalidad. Además, enfrenta un proceso ante el Juzgado de Faltas que podría derivar en multas superiores a cinco millones de pesos, según la normativa vigente.
De acuerdo a registros oficiales, Véliz ya se encontraba inhabilitado para conducir, con la licencia retenida por faltas graves anteriores. Su conducta al volante, lejos de mejorar, expone como ocurre con muchos jóvenes de Ushuaia, un patrón de conductas en las que se desafía permanéntemente a la autoridad y a las normas viales y que ahora podría derivar en consecuencias penales severas.